El uso de mascarilla es obligatorio desde el pasado jueves en todos los espacios, públicos o privados, siempre que no puedan respetarse los dos metros de distancia interpersonal. La intención es prevenir el contagio del coronavirus en pleno proceso de desescalada, pero la realidad es que esta medida protectora puede también dañar nuestra piel.
Las mascarillas, si se utilizan durante muchas horas al día, pueden producir irritación e incluso lesiones cutáneas debido al roce en las zonas de más presión, tales como la nariz y los pómulos, así como detrás de las orejas.
¿Cómo CUIDAR LA PIEL de la cara?
La limpieza e hidratación de la piel son fundamentales, así como la aplicación de alguna crema de barrera, al menos media hora antes de ponerse la mascarilla.
Además, siempre que sea posible, deberíamos aliviar la presión de la mascarilla cada dos horas. Veamos estas recomendaciones punto por punto:
- LIMPIEZA DE LA PIEL. La cara debe lavarse con agua templada y jabones limpiadores suaves, sin fragancias. Una buena apuesta es el syndet, también llamado “jabón sin jabón”. Tienen un pH parecido a de la piel, por lo que evitan la alteración de su barrera protectora. ¡Ideales para pieles delicadas y sensibles!
Otro truco para aliviar la inflamación de la piel es realizar un suave masaje tras la ducha o al finalizar el lavado de la cara.
- HIDRATACIÓN. El cuidado de la piel pasa por aplicar una crema hidratante ligera, sin olvidar el protector solar a la hora de salir de casa.
- EVITAR EL MAQUILLAJE. Mientras usemos mascarilla, es mejor dejar los productos cosméticos a un lado, ya que la mascarilla puede producir oclusión de la grasa y dar lugar a problemas cutáneos como acné, enrojecimiento de la piel o espinillas.
- ACNÉ. En caso de sufrir acné u otras patologías previas, deben mantenerse el tratamiento y los consejos de cuidado indicados por el dermatólogo o farmacéutico experto en dermofarmacia.
¿Cómo PREVENIR DAÑOS en la piel de la cara?
Para que las mascarillas sean efectivas el ajuste debe ser lo más preciso posible sobre la cara. Esto puede ocasionar algunas lesiones:
- En la zona de la nariz, debido a las varillas de metal que se utilizan para ajustar la mascarilla en la parte superior de la cara.
- Detrás de las orejas, la presión de las gomas de fijación puede ocasionar irritaciones, dolor e incluso cortes.
Afortunadamente, estos daños se pueden prevenir con estos cuatro trucos muy fáciles de aplicar:
- Productos barrera, como cremas reparadoras o VASELINA, para aplicar en las zonas de apoyo, tanto en la nariz como tras las orejas. De esta forma, se evitará el roce.
- Apósitos protectores, como los STICKS ANTI ROZADURAS de los zapatos (tipo Compeed). Eso sí, teniendo en cuenta que estos aislantes, cuando se coloquen en la nariz, deben ser delgados para no restar efectividad a la mascarilla.
- En el caso del dolor por presión tras las orejas, podemos utilizar un PRENDEDOR DEL PELO o láminas de materiales plásticos o goma EVA para sujetar las gomas en una posición que impida su apoyo en las orejas.
- DESCANSO. Siempre que sea posible, debemos aliviar la presión de la mascarilla aproximadamente cada dos horas. Tiempo que podemos aprovechar para aplicar de nuevo vaselina u otra crema reparadora.
Lesiones cutáneas, ¿QUÉ HACER si ya han aparecido?
Si al quitarse la mascarilla, se han producido marcas, podemos evitar que se formen irritaciones con cremas reparadoras. Sin embargo, si ya existe irritación o inflamación, debemos tener en cuenta lo siguiente:
- INFLAMACIÓN. Se recomienda realizar un suave masaje bajo la ducha. Incluso, puede aplicarse frío local durante 5-8 minutos, siempre con cuidado de no causar irritación o quemazón de la piel.
- IRRITACIÓN. Lavar la cara con jabón suave o con agua micelar. En caso de una gran irritación, conviene acudir al médico, quien valorará la necesidad de prescribir corticoides.
- HERIDAS. La desinfección es imprescindible, aplicando sobre la herida algún antiséptico como povidona yodada. Después, puede aplicarse una crema reparadora o un apósito hidrocoloide.
