Con la llegada del otoño, llega también un problema que preocupa a muchas personas: una caída más abundante de lo habitual y con ella, la pregunta ¿debo preocuparme?
Antes de inquietarte, tienes que saber que el cabello está continuamente renovándose, es decir, cada cabello tiene un ciclo vital de tres fases:
- Fase anágena (de crecimiento): el cabello crece aproximadamente 1 cm por mes durante 2 a 6 años
- Fase catágena (de reposo) es una fase de transición y dura solo unas semanas .
- Fase telógena (de caída): el cabello muere y cae, para dar paso al nacimiento de un nuevo cabello
En toda la cabellera coexisten pelos en fase anágena y pelos en fase telógena. Se calcula que en una cabellera normal, tenemos de un 15 % a 25% de cabellos en fase telógena o de recambio, por ello una caída aproximada de 100-120 cabellos al día es habitual.
El cabello suele entrar en fase telógena al final de la primavera y tarda unos 3 meses en caer, esto hace que una caída superior a la normal se manifieste al inicio del otoño.
Esta caída estacional es normal pero si notas que te cae más que otros años en estas fechas o más que a otras personas, debes plantearte si hay algún motivo que lo desencadene.
TIPOS DE CAÍDA DEL CABELLO
Existen dos tipos de caída anormal del cabello:
1.CAÍDA REACCIONAL o EFLUVIO TELÓGENO
Esta caída de cabello es difusa, es decir en toda la densidad del cuero cabelludo, masiva y repentina, pues se manifiesta a los 2 o 3 meses de la aparición de la causa que la desencadena.
Las causas más habituales son:
- Estrés o ansiedad
- Fatiga extrema o falta de sueño sostenida
- Dietas muy restrictivas, deficientes en proteínas y vitaminas
- Anemia ferropénica (por déficit de hierro)
- Postparto. En el embarazo, un aumento de la hormona testosterona hace que el cabello crezca más de lo habitual y después del parto la bajada de los niveles de testosterona provoca una caída superior – hasta 500 cabellos al día-a los 3 o 4 meses del mismo.
- Efectos secundarios de algunos medicamentos, como ciertos antidepresivos, antihipertensivos y anticonceptivos orales. Si es tu caso, consulta siempre a tu médico acerca de los efectos secundarios de la medicación que tomes.
- Postquimioterapia o radioterapia
La caída reaccional es reversible, es decir, desaparece una vez que identificamos y combatimos la causa o causas que la han desencadenado.
Además, seguir unos correctos hábitos alimentarios, de higiene y de cuidado capilar te ayudará a recuperar la vitalidad del cabello y contribuirá a agilizar su crecimiento.
2.CAÍDA PROGRESIVA O CRÓNICA
Este tipo de caída es poco abundante y paulatina. Puede tener origen hereditario u hormonal. La más común es la alopecia androgénetica, más habitual en hombres – por un aumento de la acción de los andrógenos (hormonas masculinas) en ciertas áreas del cuero cabelludo predispuestas genéticamente a ello -, aunque también puede afectar a algunas mujeres.
Existe un patrón de caída progresiva masculino y otro femenino:
- Patrón masculino: la pérdida de cabello se inicia en la región frontal y continúa por la zona de la coronilla.
- Patrón femenino: los factores que contribuyen son un elevado nivel de andrógenos o su mayor sensibilidad a los mismos, factores hereditarios y el envejecimiento.
En las mujeres, la alopecia se inicia por la parte superior y la corona del cuero cabelludo. Habitualmente comienza con un ensanchamiento progresivo de la parte central del cabello (alrededor de la “raya” del cabello).
La caída crónica tiene solución en las fases iniciales del proceso, si es tu caso, es importante acudir lo antes posible al dermatólogo para que te prescriba el tratamiento más adecuado y personalizado para tu situación capilar.
HÁBITOS EFICACES PARA MINIMIZAR LA CAÍDA CAPILAR
Los hábitos más efectivos para mejorar la salud y vitalidad de tu cabello son:
- Sigue una dieta variada, rica en:
- proteínas (carne, pescado, huevos, proteínas de soja)
- vitaminas: A (zanahoria, yema de huevo…), vitaminas del grupo B, principalmente la B7 o biotina (huevos, levadura, frutos secos…), C (frutas cítricas y hortalizas verdes) y E (pescado, aceite…).
- minerales esenciales para el cabello: hierro, cobre, selenio y zinc (en cereales integrales, levadura de cerveza y legumbres)
- Usa un champú suave y lacas y tintes de calidad, que no sean agresivos para el cabello.
- Siempre que puedas, deja secar el cabello al aire, evitando secadores muy calientes o planchas de pelo o si es necesario su uso, aplícate previamente productos protectores del calor para la fibra capilar.
- Utiliza, cuando sea necesario, ampollas anticaída y complementos nutricionales que con su acción combinada ayudan a frenar la caída y estimular el crecimiento capilar.
En el mercado existen ampollas anticaída muy eficaces que combinan proteínas de soja, extracto de levadura de cerveza y Serenoa Serrulata. Esta última inhibe la síntesis de lípidos a nivel cutáneo y aumenta el tiempo de vida medio del cabello antes de su caída.
El modo de empleo de las ampollas es muy sencillo:
- lavar el cabello y eliminar el exceso de humedad con una toalla
- aplicar el contenido de una ampolla raya a raya por todo el cuero cabelludo
- efectuar un suave masaje para favorecer la microcirculación y facilitar su absorción
El tratamiento puede variar en función de la marca pero habitualmente se inicia con una ampolla diaria durante un mes y el tratamiento de mantenimiento, una ampolla 3 veces por semana durante 3 meses.
Por otro lado, los comprimidos anticaída son complementos alimenticios especialmente desarrollados para contribuir al mantenimiento de la salud capilar.
En general, aportan aminoácidos (forman parte de las proteínas), biotina, selenio y zinc, nutrientes esenciales para el cabello y el cuero cabelludo, que ayudan a fortalecerlo desde el interior.
Su dosis también dependerá de la marca pero normalmente se recomienda ingerir 2 comprimidos al día, preferiblemente en el desayuno.
Por último, no podemos olvidar el champú anticaída, que es el complemento ideal a los tratamientos con las ampollas y los comprimidos anticaída.
Son muy recomendables los que contienen activos anticaída como extracto de levadura de cerveza y Serenoa Serrulata, así como pantenol para proteger, nutrir y reparar el cabello.
Es siempre mejor buscar un champú suave que permita lavados frecuentes y contiene acondicionadores que facilitan el peinado, proporcionando brillo y suavidad al cabello.
¡No te angusties! Como ves, hay muchas cosas que puedes hacer para prevenir o combatir la caída capilar.
Eulalia Mateu,
Farmacéutica
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