Farmacia deportiva: cómo evitar las lesiones más frecuentes

La farmacia deportiva es una especialidad cada vez más elegida por los farmacéuticos que buscan vincular su conocimiento sanitario con el mundo del deporte. Un informe de la Federación Internacional Farmacéutica (FIP) da prueba de ello, además de incidir en el importante valor que pueden ofrecer estos profesionales sanitarios para la sociedad.

Lo cierto es que la práctica deportiva se está extendiendo cada vez más entre la población de todas las edades. Ahora bien, la pregunta es si sabemos realmente hacer deporte, es decir: ¿conocemos nuestros límites y las recomendaciones para practicar ejercicio sin correr riesgos innecesarios? A la vista de que las lesiones deportivas son frecuentes tanto en jóvenes como en adultos mayores, la respuesta no puede ser un “sí” rotundo.

Por todo lo anterior, y según recoge en su informe la FIP, la farmacia deportiva puede aportar mucho a la hora de ofrecer apoyo a los atletas o de prestar servicios en eventos deportivos. Más aún, los farmacéuticos especializados en este área pueden asesorar sobre cómo y cuándo usar determinados productos ortopédicos para deportistas. También pueden ofrecer recomendaciones sobre qué hacer para abordar y/o evitar las lesiones deportivas más frecuentes, como:

  • Calambres musculares 
  • Esguinces
  • Tendinitis
  • Epicondilitis o codo de tenista
  • Lesiones de rodilla
  • Fascitis plantar

Consejos de la farmacia deportiva para prevenir lesiones

Prevenir las lesiones deportivas más comunes es posible si se tienen en cuenta algunas recomendaciones básicas. Pero, antes, conviene recordar que no todas las personas tienen la misma capacidad física ni de rendimiento. Por lo tanto, el punto de partida para iniciarse o mantenerse en una adecuada práctica de ejercicio es su personalización y adaptación. 

Han de tenerse en cuenta aspectos esenciales como la habituación al deporte, la edad y las condiciones de salud. Por ejemplo, si se tienen enfermedades respiratorias, musculares y/o articulares, o si se han sufrido lesiones musculoesqueléticas en el pasado. 

Además, desde la farmacia deportiva pueden ofrecer algunos consejos para evitar lesiones deportivas. O, al menos, para reducir el riesgo de que se produzcan. Veamos algunos:

  1. Elige un deporte y un tipo de entrenamiento que se adapte a tu condición física y a tus hábitos. Los deportes de baja intensidad, como caminar o nadar, son más adecuados para quienes no están acostumbrados a hacer ejercicio. 

De igual modo, si no tienes adquirido el hábito de ir al gimnasio, no pretendas llegar y batir el récord de spinning en un día. En este sentido, un entrenador personal o una clase dirigida pueden ser de utilidad para iniciarte. ¡Ah! Y, por supuesto… Olvídate de competir con ese amig@ que tanto presume de cuerpo atlético. ¡Seguro que lleva años de entrenamientos a sus espaldas! Las cosas de palacio van despacio… y hacer ejercicio como si no hubiera un mañana no te ayudará a alcanzarlo, sino, más bien, todo lo contrario: corres el riesgo de lesionarte y ¡adiós, entrenos!

  1. Calienta y enfría la musculatura. Hacer unos ejercicios lentos durante los primeros momentos e ir acelerando el paso progresivamente te ayudará a reducir el riesgo de lesiones. Unos 5-10 minutos antes de terminar la sesión, también es conveniente ir bajando el ritmo poco a poco. Sin duda, una buena estrategia para evitar recurrir a la farmacia deportiva para trata lesiones.
  2. Calendariza los días de gimnasio. Para reducir el riesgo de lesiones deportivas, también es recomendable ser constante. Un poco de ejercicio cada día, de dos a tres veces por semana, es mejor opción que concentrar toda la actividad física en una sola jornada.
  3. Utiliza la ropa y el calzado adecuados. El tipo de zapatos que utilices influirá en el riesgo de desarrollar ciertas lesiones deportivas, como la fascitis plantar. Ten en cuenta de que no necesitarás las mismas zapatillas para correr que para hacer crossfit, o para jugar al fútbol, etc. Si tienes dudas sobre cuáles son más indicadas para cada modalidad deportiva, conviene que consultes con asesores de tiendas personalizadas.
  4. Mantente hidratado. Beber agua es necesario en nuestro día a día y, más aún, cuando se hace ejercicio. Aunque no sea una práctica estrechamente relacionada con la farmacia deportiva, ayudarás a tonificar tu cuerpo y a prevenir desmayos o caídas.
  5. Ejercita todo el cuerpo. Algunos deportes requieren un mayor esfuerzo de una determinada parte del cuerpo (por ejemplo, las piernas para montar en bicicleta o los brazos en el remo). En todo caso, lo recomendable es ejercitar toda la musculatura para mantener el equilibrio muscular y proteger nuestras articulaciones.
  6. Toma medidas de protección. Existen deportes especialmente exigentes con una zona del cuerpo concreta, como pueden ser los de raqueta con el codo de la mano que la maneja. Este tipo de ejercicio puede predisponer a lesiones concretas como el conocido como codo de tenista. Para proteger la musculatura, puede ser conveniente recurrir a una codera para la epicondilitis.
codera

Además de los deportes de raqueta, otras modalidades como el golf, que requieren de movimientos repetitivos con las muñecas, pueden afectar a esa zona del brazo. Por esta razón, debes saber que existe también la posibilidad de utilizar una muñequera metacarpiana para aliviar dolores derivados de tendinitis, esguinces u otras lesiones deportivas.

muñequera metacarpiana
  1. En la farmacia deportiva, también pueden asesorarte sobre la posibilidad de realizar vendajes funcionales, esto es, utilizar una venda cohesiva para proteger articulaciones “tocadas” por algún sobreesfuerzo anterior y ayudar a prevenir, así, nuevas lesiones deportivas. 
 venda cohesiva

Aliviar el dolor de las lesiones deportivas

Las lesiones deportivas leves, derivadas de sobreesfuerzos o sobrecargas de músculos, tendones y articulaciones, pueden aliviarse desde la farmacia. Por ejemplo, existen tratamientos tópicos, como Fisiocrem spray, que sirve para abordar el dolor articular y muscular. Así, aplicar este producto farmacéutico después de hacer ejercicio, sirve para calmar la zona afectada por contusiones, tirones o torceduras.

 Fisiocrem spray

Por otro lado, la farmacia deportiva contempla también el uso de bolsas de frío-calor para calmar la musculatura afectada por malos movimientos, posturas inadecuadas o esfuerzos excesivos. Por lo general, se trata de bolsas rellenas de un gel que pueden calentarse en el microondas o enfriarse en el congelador, dependiendo del propósito de uso.

Al colocar estas bolsas a temperatura templada sobre la piel de la zona afectada, ejercen un efecto relajante y fomentan la circulación sanguínea.

Por el contrario, el frío sirve para aliviar el dolor por sus efectos analgésico y antiiinflamatorio. Por lo tanto, cuando la zona está hinchada, puede ser necesario optar por una bolsa hielo para lesiones de farmacia (que sustituye mucho más eficazmente al remedio casero de echar mano de la bolsa de cubitos de hielo o de guisantes del congelador).

bolsa hielo para lesiones

Farmacia deportiva para niños

En ocasiones, la prevención no basta y, lamentablemente, se producen las temidas lesiones deportivas. Estas son bastante frecuentes en niños, que, a menudo, sufren caídas mientras juegan, corren o practican deporte. Nos referimos, por un lado, a golpes que pueden aliviarse con cremas de farmacia como esta de árnica para el dolor.

árnica para el dolor

Por otro lado, las lesiones deportivas en niños, al igual que en adultos, también incluyen esguinces, dislocaduras e, incluso, roturas óseas que requieren atención médica urgente. También en estos casos la farmacia deportiva puede ayudarte. Uno de los productos más típicamente recomendados en la consulta del pediatra, cuando se producen este tipo de lesiones deportivas, es el uso de un cabestrillo para niños. En este sentido, es importante tener en cuenta precisamente el detalle de que esté adaptado a la talla infantil. Uno para adultos seguramente le quedará grande y no cumplirá su función. 

cabestrillo

El cabestrillo pediátrico está diseñado para asegurar la comodidad y la integridad de los más pequeños. Normalmente, se usa para mantener el brazo en reposo sin necesidad de inmovilizarlo. En todo caso, si tienes dudas sobre cuándo y cómo utilizarlo, consulta en la farmacia deportiva. ¡Estarán encantados de asesorarte!

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