Las picaduras de medusas son uno de los percances más habituales entre los veraneantes que escogen la playa como destino vacacional. Pese a todo, no todas las personas saben cómo actuar cuando estos animales marinos les dañan, y también existe en el imaginario colectivo un amplio abanico de remedios caseros que no siempre funcionan. Por ejemplo, rociar la piel afectada con vinagre para evitar que se extienda más veneno solo es efectivo con las medusas de la especie Physalia physalis, mientras que para las picaduras de otros tipos puede ser perjudicial. Por lo tanto, se debe evitar su uso.
En este post, vamos a ofrecerte algunas recomendaciones que te ayudarán a actuar correctamente ante las picaduras de medusa. Si sigues leyendo, descubrirás también algunas recomendaciones para prevenirlas.
Síntomas de las picaduras de medusa
Las picaduras de medusa suelen producir síntomas visibles en la piel, como lesiones lineales con enrojecimiento, ronchas, habones o vesículas. Asimismo, las personas a las que les ha picado alguna vez este animal marino suelen explicar que sienten picor en la zona y escozor o dolor intenso.
Normalmente, la erupción cutánea disminuye al cabo de unos días, mientras que el dolor puede persistir durante más tiempo.
Los síntomas de las picaduras de medusa suelen ser más intensos en niños, ancianos y población de riesgo, como embarazadas o personas con alergias o piel atópica.
Qué hacer ante picaduras de medusa
En caso de detectar que nos ha picado una medusa, se debe actuar con rapidez. El primer paso es salir del agua y eliminar de la piel los restos de tentáculos visibles. Un aspecto importante para este punto es que se debe hacer con guantes o usando unas pinzas. Si estás en una playa con presencia de socorristas, puedes acudir a ellos para solicitar ayuda.
Además, para evitar que el veneno se siga extendiendo y que las picaduras de medusa empeoren, es fundamental seguir estas recomendaciones:
- No lavarse con agua dulce, siempre con agua marina.
- No rascarse ni frotar con toallas u otras prendas de ropa.
- Evitar el contacto de la piel afectada con la arena.
- Aplicar frío sobre la zona picada durante unos 15 minutos. Se puede usar una bolsa de plástico con cubitos de hielo o, si se dispone de ellos, parches de frío como esta bolsa frío calor.
Si las molestias se acompañan de síntomas no cutáneos como temblores, náuseas, mareos o dolor intenso, será necesario acudir a un centro sanitario.
Cuidar la piel tras las picaduras de medusa
Cuando se producen picaduras de medusa, es muy importante cuidar la herida hasta su cicatrización y tomar todas las precauciones posibles para evitar una nueva picadura, ya que el organismo será mucho más sensible al veneno en esta segunda ocasión.
Para aliviar la sensación de picor, existen productos de parafarmacia, como el roll-on Frenapic emulsión, que alivia el picor si se aplica con un suave masaje en la zona afectada. Se debe dejar la piel destapada para permitir que se seque.
Posteriormente, ya cicatrizada la herida, la piel puede estar sensible y deshidratada. Para regenerarla, puede ser útil recurrir a cremas de calamina, un ingrediente que se obtiene de la mezcla del óxido de zinc y el óxido de hierro. Destaca por sus propiedades calmantes, que pueden aliviar el picor y la irritación o sequedad de la piel.
Consejos para prevenir las picaduras de medusa
La principal recomendación para prevenir las picaduras de medusa es no bañarse si se ha identificado su presencia, y muy especialmente en la zona del rompeolas, donde es más frecuente encontrarlas.
Con todo, si estamos en la playa y vemos medusas, conviene seguir estas recomendaciones:
- En la arena: no tocarlas, incluso si parecen no estar vivas. Sus tentáculos pueden seguir siendo urticantes 24 horas más tras su muerte.
- En el agua: dirigirse tranquilamente a la orilla. Nadar enérgicamente puede atraer a la medusa hacia nosotros.
Además, como medida de precaución, debes saber que existen protectores solares que ejercen un papel protector frente a las picaduras de medusa. Es el caso de Safe Sea crema solar, que contiene un ingrediente que inhibe el mecanismo defensivo de las medusas, por lo que minimiza el riesgo de que nos piquen. Eso sí, debes aplicarlo correctamente, según las instrucciones del producto, y no bajar la guardia con las demás medidas preventivas.
Si estás planeando unas vacaciones de sol y playa, no lo dudes: protégete contra las picaduras de medusa.
