La introducción de alimentos sólidos en la dieta de los bebés es uno de los procesos que más preocupan a los padres, especialmente a los primerizos. El Baby-Led Weaning (BLW) es una técnica de alimentación complementaria a demanda: permite al bebé dirigir el ritmo de introducción de nuevos alimentos.
Se trata de un método de alimentación que, en los últimos años, se ha vuelto muy popular por los beneficios que podría ofrecer a los más pequeños. Ahora bien, conviene conocer bien cómo funciona.
¿En qué consiste el Baby-Led Weaning?
Puede que el nombre te resulte un poco extraño, pero el concepto del Baby-Led Weaning no es difícil de entender. Si lo traducimos al castellano, significa “destete dirigido por el bebé. Es decir, con este método de alimentación, el bebé decide qué comer, cuánta cantidad y se encarga de llevar la comida a la boca por sí mismo.
Para ponerlo en práctica, el bebé se sienta a la mesa con el resto de los miembros del hogar. Se le ofrece comida sana y variada, en trozos de alimentos apropiados para su desarrollo psicomotor.
Ten en cuenta que el momento de introducir la alimentación complementaria suele coincidir con el proceso de dentición en niños. Para acompañarle en este camino, el BLW puede ser perfectamente compatible con el uso de un mordedor.
Para ayudarle a “aprender a comer”, suele ser muy práctico adquirir utensilios para bebés como los Suavinex platos. Además de tener un tamaño adecuado, también están decorados con dibujos infantiles. De esta forma, el niño disfrutará mucho más de las comidas.
Si te preocupa que pueda ponerlo todo perdido, asegúrate de colocarle un babero y búscate “aliados”. Por ejemplo, puedes recurrir a platos antivuelcos, como el bol con tapa Nuk. Tiene una ventosa que le permite adherirse a la mesa, dificultando desplazamientos que pueden hacer que la comida se vierta.
¿Y qué pasa con las salidas al parque, o los días de pícnic fuera de casa? En estos casos, suele ser muy práctico utilizar un portalimentos plegable. Es apto tanto para alimentos sólidos como para líquidos. Entre sus ventajas, cabe destacar que es totalmente hermético; además, se puede utilizar en el microondas, en el congelador y en el lavavajillas.
Beneficios del Baby-Led Weaning (BLW)
Entre los beneficios del Baby-Led Weaning como método de alimentación complementaria, algunos pediatras subrayan que mejora la relación paterno-filial:
- Los padres enfrentan las comidas con menos estrés o ansiedad. ¿La razón? El bebé se mostrará más feliz y menos irritable si puede decidir las cantidades que come en función de su apetito.
- La convivencia entre padres y bebé se ve reforzada. Con el Baby-Led Weaning, el pequeño se sentará a la mesa y comenzará a adaptarse antes a la cultura del hogar.
Por otro lado, se considera que el niño mejorará su psicomotricidad y fortalecerá su pulso y musculatura, puesto que aprenderá a coger los cubiertos y comer por sí mismo.
Por último, entre los beneficios del Baby-Led Weaning, desde un punto de vista metabólico, se considera que los niños que siguen el BLW tienen menor riesgo de desarrollar obesidad: al no forzar al bebé para que se coma todo el plato, no ingerirá más nutrientes de los que necesita.
Prevención del atragantamiento
Evidentemente, con el Baby-Led Weaning no debe perderse de vista que el bebé aún es pequeño, y lo más probable es que no sepa ni pueda masticar y tragar los alimentos correctamente. Por tanto, deben tenerse en cuenta algunas recomendaciones para prevenir el atragantamiento al tomar alimentos sólidos.
Un aspecto clave es que conviene ofrecerle siempre los alimentos (frutas, verduras, etc.) en trozos grandes, que no le quepan enteros en la boca, para que no tenga tanto riesgo de atragantarse con ellos. En este sentido, puede ser muy útil recurrir a una red antiahogo para bebés. Se trata de un artículo que dispone de una pequeña bolsa con pequeños agujeros donde colocar los alimentos (por ejemplo, los trozos de fruta). El niño los irá chupando desde el exterior de esa red: obtendrá de ellos sus nutrientes y vitaminas sin correr riesgos innecesarios.