Las infecciones son una de las principales causas de absentismo escolar, especialmente unos días después de la vuelta al cole. Unas veces, porque el propio niño necesita descanso y otras, por simple solidaridad, para prevenir el contagio a los demás alumnos.
Entre las enfermedades más frecuentes, destacan la otitis, el catarro, la faringitis o la gastroenteritis. Un listado al que debemos sumar ahora el riesgo de contagio de la COVID-19.
Con el inicio de curso pisando los talones, queremos ofrecerte algunas recomendaciones para prevenir que tus hijos se pongan malos.
No tengas miedo a las infecciones
¿Tienes la sensación de que tu hijo siempre se pone malo al volver al colegio? No te preocupes. Hasta cierto punto, es algo habitual en los niños, especialmente entre sus primeros 3 o 4 años de vida.
Durante el periodo escolar, la frecuencia de las infecciones aumenta porque los pequeños pasan más tiempo juntos.
Sin embargo, dentro de los parámetros normales, enfermar por virus forma parte de su desarrollo. La exposición a gérmenes a estas edades permite a sus defensas aprender a diferenciarlos de otras sustancias beneficiosas o inocuas, así como encontrar una respuesta adecuada a los mismos. Es decir, que el sistema inmunitario se fortalece.
Además, las enfermedades infecciosas más comunes hoy en día raramente producen ya una muerte o una enfermedad muy grave, gracias a que contamos con los avances necesarios en medicina para hacerles frente.
De hecho, la mayoría de las infecciones virales solamente precisan tratamiento de los síntomas, que desaparecen al cabo de unos días.
- A pesar de todo, es importante fomentar la prevención de infecciones con una buena higiene.
Enséñales a lavarse bien las manos y recuérdales periódicamente que no deben llevarse las manos a la boca ni recoger nada del suelo. Ni siquiera en el patio del colegio.
- Asegúrate de que el comedor del colegio promueve una alimentación variada y equilibrada, que permita mantener las defensas de los más pequeños a raya.
Para prevenir la gastroenteritis, procura que tus hijos lleven una botella de agua mineral consigo. Esto les evitará tener que recurrir a fuentes o lavabos en caso de tener sed.
- Garantizar el correcto descanso de los niños es otra tarea fundamental para que su sistema inmunitario esté fuerte.
Esto es más importante si cabe en la vuelta al cole, cuando los pequeños deben acostumbrarse de nuevo a los madrugones. Intenta que tus hijos adopten una rutina de sueño.
Procura que se acuesten todos los días más o menos a la misma hora. Además, recuerda que deben dormir, al menos, entre 8 y 12 horas diarias.
- Protégelos de la contaminación. Si su colegio está en una calle muy transitada por los coches, procura que, a la entrada y salida de clase, pase allí el tiempo justo.
Sin bajar la guardia
Si, a pesar de todos estos consejos, notas que el niño está falto de energía, o bien él mismo se queja mucho por cansancio, plantéate que tal vez necesites recurrir a un complemento alimenticio que le ayude a reforzar sus defensas.
Una opción que puede ser muy atractiva para los niños son las gominolas Arkovital multivitaminico que se adaptan al ritmo de los niños, especialmente durante la vuelta al cole, los exámenes o el reinicio de las actividades deportivas y extraescolares.
En caso de infección, sobre todo si cursa con fiebre, lo mejor es siempre consultar con el pediatra para que valore qué es lo mejor para el niño.
Recuerda que las infecciones víricas no pueden tratarse con antibióticos, mientras que las bacterianas sí pueden necesitarlos.
Si tu hijo tiene mucha tos, puedes recurrir a un jarabe como Pharysol Tos pediátrico, que calma la irritación, protege la mucosa y favorece la eliminación del moco. ¿Lo mejor? Está formulado a base de extractos vegetales.
En caso de duda con la utilización de este o algún medicamento, puedes preguntar al farmacéutico cuál es la pauta recomendada dependiendo de la edad u otras características del niño.
Y alerta con los piojos
A los piojos les encantan las melenas limpias y el calorcito del cuero cabelludo. Y, para desplazarse de una cabellera a otra, lo hacen saltando. Y ¿dónde suele haber muchas cabezas juntas?
Efectivamente. En una vuelta al cole… llena de niños que se abrazan, corren, juegan al pilla-pilla y se sientan cerca unos de otros
Por eso, cuando arranca el curso debes estar muy pendiente de las cabezas de tus hijos. Ante la posible aparición de estos parásitos, lo mejor es actuar cuanto antes.
Para ello, dos elementos que no pueden faltar en tu baño son la lendrera y un champú específico como OTC Antipiojos Fórmula Total, que puede ayudar a eliminar los piojos con una sola aplicación.
¿Cómo prevenir el contagio? Si tu hijo es propenso a coger piojos, debes saber que existen determinados champús protectores, como el spray antipiojos de OTC.
