Los dientes de leche son fundamentales para la salud de los niños y de los adultos en los que terminarán convirtiéndose. Descubre cómo protegerlos
Es posible que alguna vez te hayas preguntado cuándo se debe llevar a los niños al dentista por primera vez. En este artículo, te ayudaremos a salir de dudas y, además, descubrirás algunas recomendaciones útiles para velar por la salud bucal de los más pequeños.
¿Sabías que proteger los dientes de leche favorece el buen estado de la dentadura definitiva del adulto? ¡Te lo contamos!
La importancia de los dientes de leche
Los dientes de leche salen entre los 6 meses de vida y los 2,5 o 3 años de edad, cuando suele completarse el proceso de dentición en niños.
Esta primera dentadura, formada por 20 piezas, acompañará al niño durante sus primeros 5 o 6 años de vida, cuando los incisivos comenzarán a aflojarse. Entre los 5 y los 12 años, aproximadamente, los menores desarrollan su dentadura definitiva, que cuenta con 28 dientes.
Cuidar los dientes de leche de los niños es importante para favorecer su salud bucal y facilitar la formación de esta dentadura definitiva. No en vano, los dientes de leche también cumplen con la función de mantener el espacio en la mandíbula para los dientes permanentes, un aspecto especialmente importante para prevenir apiñamientos o problemas de alineación.
Otras razones por las que atender a la salud de los dientes de leche son que estos posibilitan la correcta alimentación de los niños y su capacidad de habla (intervienen en la pronunciación de diferentes sonidos).
Cómo proteger los dientes de leche
Los dientes de leche tienen necesidades ligeramente diferentes a las de los adultos. Así, si bien es cierto que ambos requieren de una exhaustiva higiene, los productos para el cuidado de los dientes en niños tienen algunas particularidades. Estos son algunos aspectos a tener en cuenta:
- Necesitarás un cepillo de dientes de bebé para realizar el cepillado en niños de 0 a 3 años. Son más suaves y flexibles, lo que permite proteger sus delicadas encías. Además, su mango tiene fácil agarre, por lo que los bebés podrán ir adquiriendo sus primeros hábitos de higiene.
- El proceso de dentición puede ser doloroso para los niños. Procura tener siempre a mano un bálsamo de dientes para bebés. Calmará y refrescará sus encías, lo que mejorará su bienestar.
- La pasta de dientes también requiere de componentes especiales. Entre ellos, es clave optar por un dentífrico para niños con las cantidades adecuadas de flúor y calcio, para proteger los dientes frente a las caries y fortalecer el esmalte dental.
- El sabor del dentífrico es importante, pero también lo es su composición. Existen opciones como el dentífrico Weleda niños que están a medio camino entre una pasta de dientes infantil y una de adultos, ya que su sabor es suave y fresco, pero no demasiado dulce para no acostumbrarles a gustos artificiales y/o azucarados.
¿Cuándo ir al dentista por primera vez?
Proteger los dientes de leche del niño es vital para su salud. Normalmente, la primera visita al dentista suele realizarse tan pronto como se haya completado el proceso de dentición (en torno a los 2 años de edad).
Sin embargo, también es posible realizar la primera visita al dentista antes: aproximadamente, entre el primer y el segundo año de vida (más o menos, unos 6 meses después del nacimiento del primer diente).
Con esta consulta inicial, el especialista podrá hacer ya una primera evaluación de los dientes del bebé, al tiempo que:
- Los progenitores podrán recibir información de utilidad para un correcto cuidado de la salud bucal de su hij@. Por ejemplo, el dentista podrá recomendarles el uso de un cepillo Lacer junior o similar.
- Los bebés podrán ir acostumbrándose a la sensación de estar en el dentista, y a los profesionales que se encargarán de revisar su boca.
Normalmente, la primera visita al dentista de los niños suele incluir un examen de sus encías y mucosa, dientes, mandíbulas y mordida. A partir de ahí, el especialista marcará las revisiones necesarias para seguir de cerca el desarrollo de la boca y la salud de los dientes del pequeño, para poder actuar a tiempo en caso de que fuera necesario. Por ejemplo, si fuera preciso realizar una limpieza bucal o pautar la utilización de un colutorio con flúor.
Las caries, un problema frecuente con los dientes de leche
Aunque los dientes de leche no sean definitivos, es importante acudir al dentista para detectar y tratar las caries en niños. De lo contrario, pueden conducir a infecciones de menor a mayor gravedad si no se atajan a tiempo. Por eso, si tu hijo o hija experimenta fiebre y dolores sin otra causa aparente, no olvides revisar su dentadura y llévalo al dentista en caso de duda.